De la pasión a la perfección

Julio definitivamente tiene una mano especial con el arte. Incluso cuando era un niño pequeño, pintaba las cosas con un nivel de perfección, que no se adaptaba en absoluto a su edad. Sería una pena no fomentar este talento. Julio ha estado visitando el estudio de pintura en la Casa de los Tres Mundos dos veces por semana durante aproximadamente 2 años, donde aprende mucho sobre diferentes técnicas de pintura, colores, etc.
Pero Julio tiene otra afición especial a la que se dedica, y eso es el fútbol. Se dedica a este deporte con el mismo entusiasmo intenso, con que se retira a un rincón tranquilo, para pintar. Por ejemplo, este año pidió el libro “Las Reglas de Juego del Fútbol de la FIFA”. Algo especial para un niño de 12 años, cuando sus GUSANITOS -Compañeros querían libros de «Harry Potter», «La casa embrujada» y cosas así.
Al principio me preguntaba cómo podrían reconciliarse estos dos pasatiempos fundamentalmente diferentes. Sin embargo, cuanto más veo a Julio hacer sus actividades, me doy cuenta de que quizás son precisamente estos contrastes, los que le permiten florecer por completo en una u otra actividad.
Después de diseñar nuestra tarjeta navideña, Julio dedicó horas tras horas a pintar la Catedral de Granada. Con este cuadro participará por primera vez en una exposición. La exposición se efectuará el 15 de diciembre de 2022 a partir de las 17:00 en la Casa de Los Tres Mundos.
Julio Armando Quintana López tiene 12 años. La pasión, la intensidad y la dedicación con la que sus manos crean cuadros, es fascinante. Me da placer verlo trabajar, porque parece como si en esos momentos todo su ser estuviera inmerso en lo que está haciendo. Aunque actualmente se encuentra en la fase de renderizar una imagen uno a uno, que en sí mismo es un gran arte, estoy seguro de que con los años descubrirá y desarrollará su propio estilo único.
Estoy super orgullosa de este muchacho. Un enorme aplauso por tu esmero y dedicación.
(Priska Buchmann)

Un sueño, que se ha hecho realidad…

De todo corazón MUCHAS – MUCHAS – MUCHAS FELICIDADES Auxiliadora, Keysi, Kianny y Julio, que ni solamente terminaron la primaria con gran éxito, sino también ganaron diferentes títulos. Keysi y Kianny recibieron el título “Excelencia Académica”, como mejores alumnos del año 2022. Julio, el creador de nuestra tarjeta navideña, recibió el título del mejor alumno en la materia “Deporte, Arte y Cultura”. Tres logros, que realmente merecen un gran aplauso.
En este lugar también nuestras madrinas y nuestros padrinos se merecen un gran GRACIAS, por la educación, dedicación y el cariño que les brindaron a diario a estos cuatro jóvenes.
Lo que a mí personalmente me alegra más que todo, que en el transcurso de los años hemos despertado la comprensión, que con el término de la primaria la educación de un niño no ha terminado. La mayoría de los padres entiendan, que la transición de la primaria a la secundaria es un proceso natural, y necesario para el futuro de sus hijos.
Para esta meta nos hemos esforzado desde nuestra fundación hace 11 años. A partir del 2023, 9 de nuestros niños asistirán a la escuela secundaria: Suheyla en el 10° grado, María en el 9° grado, Andrea, Natieska y Kimberling en el 8° grado y nuestros cuatro recién llegados, Auxiliadora, Keysi, Kianni y Julio en el 7° grado.
Nuestro objetivo, al que aspiramos desde hace años, se ha ido convirtiendo poco a poco en un sueño hecho realidad. ¡Con una alegría ilimitada expreso mi gran respeto a todos los involucrados por este gran logro!
(Priska Buchmann)


Plagas no sólo son plagas

Las circunstancias climáticas como la composición de la tierra contaminada se nos hacen muy difícil, que en nuestros huertos crezcan frutas, verduras etc. Sin embargo, lo hemos logrado con gran esfuerzo, que en el transcurso de los años hemos podido mejorar la tierra, mientras continuamente la hemos liberado de residuos no naturales como plástico, vidrio, tela, aluminio y otra basura desagradable. Además, echamos todos los desechos orgánicos de la cocina en un hueco de nuestro jardín. Nuestras gallinas arreglan lo suyo, mientras nos liberan de una gran parte de las plagas de hormigas y otros tipos de parásitos.
Por las razones anteriormente mencionadas, nos pone triste, si una cosecha esta afectada de una plaga. Un día nos dimos cuenta con un gran susto, que las hojas de nuestras maracuyás estaban llenas de unos gusanos negros. Vigilando como vinieron estos gusanos a nuestras hojas de la planta, nos dimos cuenta, que se trata de una mariposa hermosa, que pone minuciosamente huevito por huevito en dicha hoja. Investigando por internet, como salvar estas orugas, sin que nos friega la cosecha, nos dimos cuenta, que hay montones de venenos, para deshacerse de estos “parásitos”, pero casi nada de informaciones, como salvar estos animalitos.
Así hicimos el experimento, mientras pusimos los gusanos en un vaso, con hojas de maracuyá y unos palitos. Tardaba casi 2 semanas, hasta que estos feos gusanos negros pasaron a una oruga, para dedicarse en tranquilidad a su proceso de transformación. De ella finalmente salió una hermosa mariposa de color anaranjada.
Resulta, que una plaga no es necesariamente una plaga. Si abres tu mente y tu corazón hacia la naturaleza, te das cuenta, que el ciclo de la naturaleza es definitivamente una maravilla, que el humano como parte de todo debería respetar.
(Priska Buchmann Scherer)


“Cualquiera puede cocinar”…

…y mucho más. No importa lo que hagas, el resultado de tu trabajo es siempre una cuestión de voluntad, de amor a lo que haces y porqué lo haces. Inicialmente me gustaría hablar acerca de mi experiencia a nivel personal. Trabajar como cocinero ha sido un desafío muy extravagante, durante el cual me he dado cuenta de ciertas cosas fascinantes y llamativas.
Comenzando con mi periodo como Tío en Los GUSANITOS, que me hizo ver la importancia del trabajo en equipo al igual, que la enseñanza para los niños ya que es algo esencial. De que el cariño y el amor, y al mismo tiempo cumpliendo con reglas y límites hacia los niños, también son puntos esenciales en la educación de un niño. El cariño nunca fue un problema, porque amo a los niños más que a nada. Mi gran obstáculo fue, mostrarles los límites entre diversión y seriedad.
Dándonos cuenta de esta problemática, Priska Buchmann me ha abierto la oportunidad de una nueva experiencia, la cual fue a la cocina como cocinero. Un arte atractivo, que me ha dado la oportunidad, aprender algo nuevo y al mismo tiempo seguir “malcriando” mis queridos niños, sin el deber de educarlos, 😉.
Mi nueva tarea como cocinero fue apasionante, que me hice despertar la creatividad al momento de innovar recetas cuyo objetivo es, brindarles a los niños felicidad a través de la comida. Fue sorprendente ver el cambio en mi al comenzar por primera vez a cocinar, ya que jamás había interactuado en lo que era la cocina. Conforme fue pasando el tiempo fui consolidando y aprendiendo un poco más cada día a cerca del arte de cocinar. Ha sido una meta personal, que he podido lograr porque a como dice el título, me di cuenta que, “Cualquiera puede cocinar”. Una frase que me llamó mucho la atención y que la tomé de una película infantil, que reflejaba que, sin importar la experiencia, si una persona quiere y se lo propone, puede aprender sin ninguna dificultad. Eso es, lo que a mi me ha sucedido definitivamente en todo este tiempo. He aprendido a amar lo que hago, pero gracias al amor de los niños, en todo el transcurso he tenido crecimiento personal y la experiencia laboral ha sido gratificante. No renunciaría a estas experiencias por ningún precio.
(Luis Fernando Chávez Hernández)

Del desafío al estilo de vida

Se dice, que nunca se deja de aprender en esta vida y que los niños nos pueden enseñar mucho, de lo cual hoy puedo dar fe. Cuando solicité el puesto me preguntaron entre otras cosas, si alguna vez un niño me había ayudado a resolver un problema a través de un juego, o si mis habilidades puras de observación me habían dado a nuevas ideas. Mi respuesta fue un claro no, ☹. Ahora es genial y, a veces incluso divertido, que mis niños me enriquezcan exactamente con esta experiencia. Definitivamente puedo decir, que he crecido como persona solo con este desafío. He desarrollado habilidades que no creía tener, o ni siquiera sabía que tenía.
El reto de trabajar con mis niños es una aventura diaria para mí. Noto como todos y cada uno de ellos avanza en sus debilidades. También encuentro, que una debilidad se equilibra con otra fortaleza, y todos los niños son inteligentes. Cada uno de nuestros niños tiene habilidades diferentes, todos son personalidades muy diferentes. Tienes que adaptarte a estas circunstancias para lograr el objetivo que está en tu centro.
Le debemos todo este progreso al método María Montessori, que comenzamos a implementar hace un año y ahora lo estamos poniendo en práctica constantemente. Los juegos Montessori lo cambiaron todo. Nos dimos cuenta de que un niño no puede aprender estando constantemente atado a un lugar. Un niño debe poder moverse, el material de aprendizaje debe llevársele de una manera divertida y lúdica. Mientras dejamos que el niño aprenda en un ambiente alegre, él es feliz. Su felicidad se nos contagia, y un niño feliz es capaz de cualquier cosa.
Mi trabajo sigue siendo un reto diario, que acepto con gusto. Lo que inicialmente vi simplemente como un desafío, ahora lo veo desde una perspectiva diferente. El reto se ha convertido en mi estilo de vida. Mis niños son mi vida ahora. Me llena de alegría apoyarlos en todo lo que necesitan para «crecer». Enseñarles siempre un poquito más y sobre todo aprender de ellos. Cada uno de ellos es maravilloso con un gran potencial. Cada uno es especial, así que para mí el trabajo se ha convertido en parte de mí ahora. Es más que simplemente hacer un trabajo. Es el amor por el niño y por la tarea de que cada niño pueda lograr, lo que parece inalcanzable en este momento. Nuestros niños pueden lograr lo que quieran, porque su potencial está ahí.
La estrella que lleva cada uno de nuestros niños por dentro siempre brillará, mientras nosotros como adultos nos aseguramos, de que esta luz nunca se apague.
(Mackeline Hernández)